Cómo relucen tus ojos!
Como brillan los rayos de sol
sobre las dunas de plata de mi mar…
Cómo arde tu alma!
Cuando sueñas con volver a pedir mi mano,
y unir de nuevo nuestras almas hasta la eternidad…
Cómo bate mi corazón!
Cuando el barco acecha la bahía
y tu me consagras con tus brazos de inmortalidad!
Cómo te ansía mi alma!
Cuando mi tren golpea las vías
que intermitentes me llevan a nuestro hogar…
Eres mi Norte y mi roca,
mi castillo y escudo,
mi fuente y altar…
El regalo del cielo,
bendición, anhelo,
tesoro del mar!