Contigo

Y sopló el viento de poniente…
añadiendo vagos recuerdos del frío
que llega raudo e inminente…

Pero llegaste tú,
caballero imponente…
que incendias con tu presencia
cualquier barrera impaciente…

Calmas el hastío,
renuevas el dolor ausente…
llenas de amor cada una de mis llagas,
curas el vacío de este alma demente…

Sanas porque en ti confío,
cuidas de este corazón creyente…
Contigo miro al horizonte sombrío,
contigo quiero vivir para siempre,
vehemente…