Sombras y polvo

Y si al final solo somos,
sombras y polvo,
abocados a un mismo final sin compañía,
a una misma partida sombría.

Espíritus y añicos,
expuestos a un mismo sol sin clemencia,
a una misma noche gélida sin indulgencia.

Alma y cenizas,
envueltos en un solo talle sin salida,
en un solo ente sin vida.

Sombras y polvo,
entrañas de un mismo ser
que solo nos reconocerá al nacer.