A veces elegimos
nuestras aventuras
sin saber ciertamente
el rumbo o la dirección…
Una fuerza nos empuja
a ciegas…
y no podemos negarle su rigor…
Nos pueden llamar locos,
atrevidos o irreflexivos,
¿pero qué hubiera sido de nuestras vidas…
si hubiésemos dicho…no?
Escoge bien tu sino,
y escucha a menudo tu voz,
que a veces te habla a gritos…
y tú desprecias su clamor…
Trenes que cambian caminos,
vías que estrechan tu sinrazón…
Andenes de un sólo sentido,
estaciones de un sólo corazón.
Destinos…