Volar a tu lado,
lejos del oleaje amargo de la decepción y su estrago…
Volar a tu vera,
dejando atrás las lágrimas secas de esta savia severa…
Volar contigo,
sorteando los vientos fríos del norte y su inevitable castigo…
Volar a tu flanco,
afrontando esta tormenta de centella y fango…
Volar taimado,
planeando entre mares de plata y fado…
Volar,
solo quiero volar,
sobre este cielo dorado…