El gran sanador

Acaricia y golpea,
abraza y empuja,
halaga y desdeña…

Llena tu corazón de alegría,
pero también de tristezas…
colmando cada recodo,
de amores frágiles,
y de miradas tiernas…

Enseña y muestra,
revela y confiesa…
aunque no siempre aprendamos
su lección
aún funesta…

Todos nos lo damos,
nos lo entregan,
y manifiestan…
todos esperamos que un día,
el tiempo nos de la respuesta…