Ya no tengo lágrimas para pensarte, ni sentimientos que puedan colmar tu recuerdo…tu brío…
Se los llevó el viento con la luna y el hastío, con el alba y su rocío…en este atardecer sombrío…
Ya no me dueles, ya no suspiro…ya no me mueve tu frío…
Ya no colmas mis noches, ya no navego en tus ríos…
Ya eres esa primavera fría, tardía…que impide el ansiado estío…
Eres esa escarcha parda…que nubla el corazón baldío…
Ya no tengo fuerza para odiarte, ya sólo siento escalofrío…
Ya no tienes poder para manejarme, ya sólo eres umbrío…
Ya no cuentas, ya no mientes, ya sólo eres vacío.
